domingo, 5 de noviembre de 2017

Comprendiendo los TCA


Irene Alonso Vaquerizo, autora de "Ana y Mía, no quieren ser princesas", te cuenta en este post el proceso creativo de su libro, y lo que la motivó a escribirlo.


Desde Meridiano Editorial, deseamos que la lectura de este post te acerque un poco más a la  autora y te motive a la lectura de su libro.



Portada del libro de Irene Alonso Vaquerizo



"Ana y Mía no quieren ser princesas. La cara oculta de los trastornos alimentarios" es un libro que pretende favorecer la compresión y empatía de estas alteraciones, útil y práctico para afectados y  familiares. 

Los trastornos alimentarios son alteraciones psicológicas por lo tanto, no se eligen,  y conllevan sufrimiento. 


Busquemos ayudar y no juzgar a los que los padecen. 


En el siguiente post te resumimos los que puedes encontrar en sus páginas.    
 
La idea de escribir un libro de estas características empezó a rondarme cuando llevaba diez años trabajando con afectados y sus familias en  la asociación ADANER (Asociación en defensa de la atención de la anorexia nerviosa y bulimia), y tardé cinco años más en ponerme a hacerlo. Mi colaboración con esta asociación me ha permitido ver a estas alteraciones desde diferentes  ángulos y visiones, según las características del afectado y su familia. Es una experiencia  muy enriquecedora  y un complemento a mi práctica clínica. Mi participación en grupos de familiares y afectados me ha facilitado acercarme más a su entorno social, a sus problemas cotidianos y no solo a los síntomas. Fue esta visión familiar y social de los trastornos lo que me llevó a querer plasmarlo en un libro que resultase práctico y didáctico

Considero que es un libro útil, incluso para aquellos que  no padecen el problema y que  tienen curiosidad de conocer a las personas que los experimentan. Una aproximación al día a día de los afectados y sus familias, sin emitir juicios. 

Generar una actitud empática en el lector fue uno de mis principales objetivos. Para lograrlo era fundamental conocer a las personas que están detrás de los síntomas. 

Mi motivación era promover la comprensión frente al juicio

Cuando se conoce la situación que vive el otro es mucho más difícil criticarle. Me costó mucho encontrar la fórmula para lograrlo, fueron meses de pruebas y al final me decidí por intentar describir situaciones a través de historias de personas que padecían TA. Así surge la primera parte del libro, las seis historias que tienen de protagonistas a afectados de TA y sus familias. Al final de cada historia, intento ser didáctica explicando al lector lo que hay detrás de ciertas actitudes alteradas que expresa el protagonista. Con ello pretendo ayudar a entender con un lenguaje sencillo lo que se esconde detrás de las palabras: ansiedad, depresión, restricción alimentaria, atracón de comida…. 

El enfoque es realista, reflejo de quienes lo padecen, yendo más allá del prototipo de enfermo de TA. Personas con diferentes edades, caracteres, síntomas, necesidades…. Y su  universo familiar. No solo los sufren mujeres adolescentes, también hay adultas y hombres, aunque en menor número. 

Historias generadoras de esperanza apoyadas por los hallazgos de los últimos estudios, lo que espero contribuya a dar esperanza en que se puede superar un trastorno de este tipo. 

Práctico al estar basado en el conocimiento de años de observar  y escuchar a afectados y sus familias. 

Un libro comprensible para  todos  y solo para quienes  no se dedican al ámbito de la salud mental. 

El libro está estructurado en tres apartados

La primera parte son seis historias, y son a través de estas historias donde se muestran los diferentes trastornos alimentarios: anorexia, bulimia, trastorno no especificado y trastorno por atracón. 

Las historias están protagonizadas por cinco mujeres y un hombre, de esta forma intento mantener más o menos la proporción que señala que de diez casos uno será de un varón. Las edades también son diversas, una adolescente, dos mujeres jóvenes, una mujer y un hombre adultos y una mujer de edad madura.  Aunque la edad más habitual de comienzo de estos trastornos es la adolescencia, hay mujeres y hombres adultos que lo padecen, en algunos casos se iniciaron en la adolescencia y en otros debutaron en el trastorno a edades adultas. La variedad (edades, sexo, síntomas, personalidades, gravedad…) ayuda a que los lectores afectados puedan identificarse y también a conocer que estas alteraciones son diversas. Después de cada historia, doy algunas explicaciones clínicas para ayudar a comprender lo que le sucede al protagonista y su familia. 








En la segunda parte explico cómo se origina  y desarrolla el trastorno, las repercusiones en la salud física y psicológica, las posibles opciones de cambios con el entorno, la explicación de diferentes tratamientos, las dificultades en la aceptación de la alteración y del tratamiento, la preocupación familiar (no entender, angustiarse, culparse...) y la necesidad de su sana implicación en el proceso para el beneficio de ellos mismos y del afectado. 
En la tercera parte facilito una guía dirigida a que los familiares puedan convertirse en un apoyo sano durante el proceso de recuperación del trastorno. 


Espero que os ayude y que mantengáis la esperanza para seguir luchando.